martes, 3 de marzo de 2009

El error de Descartes (2)

De esta manera aquellos que nos unía con los dioses, lo transcendente, aquello que nos separaba del resto de los seres debe ser revisado y concluir ahora que:
  • La razón surge de la naturaleza de nuestro cerebro del cuerpo y de la experiencia corporal. Los mismos mecanismos neurales y cognitivos que nos permiten percibir y movernos también crean nuestro sistema conceptual y nuestros métodos racionales. La razón, pues, no es un rasgo trascendental del universo o de una mente descarnada.
  • La razón es evolutiva, en el sentido de que la razón abstracta se construye sobre y hace uso de las formas de la percepción y de la inferencia motora que están presentes también en los animales “inferiores”. Así la razón no es una esencia que nos separa del resto de los seres vivos, sino, al contrario, que nos sitúa en un continuum con ellos.
  • La razón no es universal en el sentido trascendente, no es parte de la estructura del universo. Es universal, a lo sumo, en tanto que es una capacidad que comparten todos los seres humanos. Con lo que encontramos afinidades en cómo la mente está incorporada en todos los hombres y mujeres.
  • La razón no es completamente consciente, sino principalmente inconsciente. El pensamiento es fundamentalmente inconsciente, no en el sentido freudiano, sino en el sentido en que opera detrás del nivel consciente, inaccesible a él y tan rápido que no podemos contemplarlo de un modo directo.
  • La razón no es literal, sino metafórica e imaginativa
  • La razón no es desapasionada sino enlazada emocionalmente

Si nuestro cuerpo fuera de otro modo, nuestro mundo y la verdad que parece encerrar también habrían sido de otra manera.

lunes, 2 de marzo de 2009

El error de Descartes

El error de Descartes
Antonio Damasio

" ...La actividad mental desde sus aspectos más simples a los más sublimes, requiere a la vez del cerebro y del cuerpo. El cuerpo tal como esta representado en el cerebro proporciona algo más que el mero soporte y el marco de referencia para los procesos neuronales: proporciona la materia básica para las representaciones cerebrales.

En la perspectiva del marcador somático, el amor, el odio y la angustia, las cualidades de bondad y crueldad, la solución planeada de un problema científico o la creación de un nuevo artefacto, todos se basan en acontecimientos neurales del cerebro, a condición de que el cerebro haya estado y esté ahora interactuando con su cuerpo..."


En la concepción racionalista (Platón, Descartes, Kant), para obtener los mejores resultados, las emociones deben dejarse fuera del proceso de razonamiento.


El pensamiento racional debe no afectarse por la pasión.


En la concepción de la razón elevada uno separa los distintos supuestos de la elección y valora en términos de coste/beneficio, de ventaja/desventaja, pro/contra cada uno de los supuestos y sus consecuencias.

"... Los marcadores somáticos son un caso especial de sentimientos generados a partir de emociones secundarias que han sido conectados, mediante aprendizaje, a resultados futuros predecibles de determinados supuestos..."
Teniendo en cuenta que "el provecho subjetivo esperado" es lo que uno quiere maximizar y de ahí se infiere lo que es bueno y malo."...


Ampliando el supuesto e introduciendo el concepto de "moral" y /o "ética" los marcadores somáticos bien pueden ser la explicación, también, del origen de la aparición, por vía de la pura necesidad (adaptación al medio) de los principios morales, de los principios éticos en el cerebro humano.

Sobre la vertical del 32
Una tarde más de un sábado más
en un repente de necesidad
de trascender
y compartir